Esta reflexión vino por el reencuentro que tuve con mi F3, que ya tenía años encerrada, y que decidí sacar hace unos 6 meses para tomar un rollo con angular 16mm que hasta ahora me tome la molestia de revelar y por fin tengo en mi manos tales imágenes, pero esa será otra entrada, porque esta es dedicada a está cámara que no se cansa de acompañarme en mis imágenes, que ha pasado por tantas cosas como yo experiencias y porque ahora, lejor de estar caduca, brilla con elegancia en el despertar de mi inquietud por las diapositivas.
Les dejo una imagen por si no tienen el gusto de conocerla.
PD: felicidades a Nikon por tan bella creación, que por cierto cuenta con un montón de accesorios, ideales para entretenerte y sorprenderte por su ocurrencia de existir.
La F3 también me trae recuerdos... mi papá, en una de esas ondas que iba a volver a agarrar un hobby de su juventud, compró una.
ResponderEliminarDespués de su muerte, yo me quedé con la camara y aunque no la uso (la última vez que tomé fotos con él fue hace unos 3 o 4 años), me trae muchos recuerdos de cuando íbamos juntos a tomar fotos.
Mi estimado Tony yo también conservo la F3 de mi padre, es increible cómo estos aparatos pueden también tener tan lazos fuertes con personas. Te recomiendo que la uses, aunque sea una vez al año, recuerda que la maquinaria se puede atrofiar si no se mueve.
ResponderEliminarbueno bueno... yo sé que llego muy atrasado a esa plática... pero no quiero dejar de dar mi opinión... los dos, Tony y Mario saben que no tengo una F3, y desafortunadamente nunca tuve las gracias de usarla... pero siguiendo la onda de los papas, traigo una nikon que perteneció al papá de un gran amigo y aqui la traigo con mucho cariño muy contento, pues aunque no sea la F3, es de la familia y está maravillosa... gracias Mario!!!
ResponderEliminarpor cierto... Mario, estamos aguardando las fotos que mencionas en el post... ya se pasaron algunos meses, eh!!! queremos verlas!!!
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